jueves, 27 de junio de 2024

El corazón dorado

 


Un señor arqueologo, de nombre Mateo de 50 años, llega a una gran casa abandonada en medio de un gran campo. La casa a la que llega, es una mansión de techos altos y firmes, grandes ventanas y una gran fuente de agua en el exterior a la entrada de la casa. La fuente se ve adornada con unos delfines de piedra y arriba un querubin sosteniendo una cornacupia. En esa casa, entra Mateo y se encuentra con un pasillo grande. Entra en el y descubre un salón de descanso en donde hay unas lamparas grandes con unos vitrales de colores en su decoración. Mateo se sienta en ese lugar y empieza a buscar a traves de un radar, lugares en donde se halla dinero. En ese momento, Mateo sube a las escaleras de la casa, y observa un corredor grande tambien. En eso, Mateo entra en una de las habitaciónes. Ahi descubre un cuarto en donde hay una infinidad de baules.Se acerca a abrir algunos, pero se da cuenta que estan vacios. En ese momento, oye un ruido de un golpeteo. Se escucha en la habitación, y Mateo ve que hay otro baúl en la habitación pero más grande. Se acerca y el golpeteo proviene de ese baúl. En ese momento, Mateo se agacha para buscar alguna llave para abrirlo. Mateo ve que atras de una cama vieja de la habitación, hay una llave. En eso, agarra la llave y la inserta en la cerradura. Abre el baúl y ve que dentro de el, esta un corazón dorado grande con incrustaciónes de zafiros. Mateo, soprendido por su descubrimiento, agarra el corazón y lo mete en una bolsa que lleva en su mochila. Cuando va de nuevo al salón, se sienta y saca el corazón de su bolsa. Ve que en ese momento, el corazón brilla intensamente y lanza un brillo escarlata. En eso, cae al suelo y empieza a salir un humo rosado en donde se forma un personaje como un genio. El genio observa a Mateo serio y le dice: ¿que haces en esta mansión y que deseas? Mateo ve con asombro al genio y le dice: No se que haces, pero este corazón es mio. El genio se para enfrente de Mateo y le dice: No saldras de esta mansión hasta que me digas de donde vienes. Mateo se rasca la cabeza y le dice: Pues vengo de una ciudad muy cercana. El genio le vuelve a preguntar: ¿y que es lo que quieres con el corazón?- Quisiera ganar con esto dinero para irme a otro lugar, no soporto estar donde vivo. El genio toca el corazón y le dice: Cumplido esta. El genio se vuelve para frente a Mateo y le dice: Ahora puedes irte. El genio se vuelve a meter en el corazón y este deja de brillar. Mateo, sorprendido por el encuentro, guarda de nuevo el corazón en su bolsa. Entonces, Mateo decidido a salir de la mansión, escucha unos pasillos en el corredor. Voltea y ve a unos soldados mecanicos que se mueven hacia el. Mateo, asustado, sale corriendo y los soldados mecanicos lo persiguen. En ese momento, llega hacia un arbol donde se esconde en un agujero. Los soldados mecanicos llegan ahi, pero no ven nada. En ese momento, se van corriendo hacia otra parte. En ese momento, Mateo sale de su escondite y va hacia un tronco en donde se sienta. Ahi saca de ahi, el corazon y lo observa. Mateo ve que el corazón brilla de nuevo y sale de el de nuevo el genio. El genio le dice: ¿y ahora que otro deseo quieres? Mateo le contesta: Quiero ir a una casa grande a descansar. El genio chasquea los dedos y le responde: Hecho esta. Mateo entonces, se mete a un tunel magico en donde llega a una gran mansión. Es una mansión de tipo pared gris de granito. En esa mansión, se mete y ve una alberca de agua fresca. Decide meterse en la alberca y ahi saca el corazón dorado. Lo pone junto a la alberca y se relaja, olvidando la tensión de haber ido a esa mansión como su trabajo de arqueologo.  


El encuentro con un nazista

 


Un señor de 50 años, Alfredo, retirado del ejercito, se dispone a descansar en su cama en su casa. De repente, en medio de sus sueño, se despierta y ve una figura de un soldado que no logra captar a primera vista. Se trata de Himmler. Este tiene una vara y señala al señor: ¿que haciendo dormido, soldado? El señor se levanta de improviso y se pone en señal de saludo militar: ¡Saludos señor! Himmler se rasca la cabeza y le pregunta: ¿en donde hay una silla? El señor le trae corriendo una silla de otro cuarto y se la pone. Himmler se sienta cruzando las piernas y le pregunta:¿ te gusta mi abrigo? Alfredo se rasca su cabeza diciéndole: No, sin duda se le ve bien. Himmler saca una pipa y le comenta al señor: Mira, usted vive rodeado de vecinos que no le hablan ¿le parece bien eso? El señor le hace una exclamación: ¡claro que no, señor! Himmler se rasca la cabeza, poniendo su gorra a un lado. Le dice: A mi lo que me molesta es la actitud falsa que tienen sobre la vida. Se pasan echando chismes entre ustedes y dandose de buenas personas, cuando en realidad no lo son. Alfredo se rasca de nuevo su cabeza y le pregunta: ¿usted se consideraba buen alemán? Himmler con su vara golpea la silla y le dice: ¿por que la pregunta, soldado? Alfredo se rasca la cabeza y le dice: Yo supongo usted era nazi. Himmler se pone de nuevo su gorra. Le dice: En efecto, lo era. Alfredo le dice: Espero, tengo algo que enseñarle. Alfredo sale corriendo hacia otro cuarto y saca un libro de un estante. Se lo da a Himmler y le comenta: Este libro se llama letanias del atardecer. Era del pensador Vasconcelos. Himmler se rasca la cabeza y le dice: ¿para que quiero leerlo soldado? Alfredo le dice: Este señor tambien era como usted, muy recio y fuerte. Y yo creo muy simpatizante con ustedes. Himmler se levanta de la silla y le dice: Le voy a enseñar como es un campo de concentración. ¿Tiene usted a la mano un pizarrón y un marcador? Alfredo se va hacia otro cuarto y consigue un pizarrón y un marcador. Himmler empieza a dibujar en el pizarrón un dibujo complejo de lo que es un campo. Le agrega unas bardas electricas y le dice a Alfredo: ¿ve que es esto? -No, no lo comprendo bien. Himmler se rasca la cabeza- Esas son las bardas que hay en ese campo. De ahi no pueden escapar los prisioneros. Alfredo se sienta en la silla y se pone a revisar el dibujo-Tiene razón, general. ¿asi es entonces un campo? Himmler asienta con la cabeza:-Efectivamente, asi es. Himmler entonces mira hacia una puerta y le pregunta: ¿quien esta detras de la puerta? -No lo se, ahi es una bodega. Himmler en ese momento abre la puerta y entra un soldado con cabeza de pulpo. Este soldado, saluda a Himmler:- Saludos mi general. Himmler entonces le da un apreton de manos. -Mucho gusto ¿ya vio a este recluta? El soldado con cabeza de pulpo se acerca y lo mira fijamente-¿Y usted era soldado? -Si señor, lo era. Himmler y el soldado con cabeza de pulpo lo agarran de los hombros y se lo lleva,Himmler dice: Acompañenos entonces, vamonos por unas cervezas y luego al campo. Los tres salen lentamente de la casa. 

lunes, 10 de junio de 2024

El espejo de los deseos


En un pueblo tranquilo, cercano a un gran castillo solitario, se despierta una chica Lucinda, una chica de 29 años de cabello rubio. Se despierta junto a su perro Jackie, un labrador grande. Van hacia una cocina en dónde está un señor preparando la comida, una salchichas asadas grandes. Lucinda se sienta en la mesa, mirando con atención como el señor, su papá, prepara la comida. Lucinda le pregunta a su papá: oye pa, soñé que iba a visitar el castillo cercano a la casa. El papá de Lucinda le da unas palmadas en su espalda, y le dice: oye hija, esas son fantasías ¿Que es lo que vas a ver en ese castillo? Lucinda peinandose su cabello le dice: quiero ver que hay en ese castillo, dicen que hay un espejo mágico que puede cumplir deseos. El papá de Lucinda le sirve su salchicha y le dice: esos son cuentos hija. Yo tengo que irme a mi trabajo de sembrador y lo mejor es que no vayas por ningún motivo ¿Me entendiste? Lucinda asiente con la cabeza y acaricia a su perro. Su papá entonces le acaricia su cabeza: bueno mi amor entonces nos vemos. Cuídate no hagas alguna travesura. Su papá sale de la casa. Entonces Lucinda mira emocionada a su perro y le dice: ¡Es hora Jackie! Salen de su casa caminando lentamente hacia el castillo. Lucinda y Jackie llegan entonces a la entrada del gran castillo, el cual es de color blanco con los tejados de sus techos azules. Entran y llegan a la gran puerta, el cual tiene un corredor amplio. Al internarse en el castillo, encuentran una gran escalera redonda como de caracol, que lleva a una parte superior. Lucinda y jackie suben la escalera, y llegan a otro corredor grande, lo van recorriendo hasta llegar a un gran cuarto en donde hay una cama tipo victoriana y algo grande cubierto por una sabana. Lucinda se acerca con Jackie lentamente hacia eso y jala la sabana. Tras la sabana, esta un espejo grande, tipo dorado. En su marco, tiene dos querubines agarrando arriba el espejo. Lucinda entonces se observa en el espejo junto con Jackie, y acaricia a Jackie. Ella se pregunta: ¿que habra con este espejo? Entonces, Lucinda lo toca y aparece el espejo como luces que se mueven. Lucinda le pregunta a Jackie ¿sera magico? Entonces Lucinda hace una pregunta ante el espejo: ¿me puedes dar una rica tarta de fresas? El espejo empieza a brillar y saca casi volando una tarta de fresas. Entonces, Lucinda, sorprendida, agarra a su perro. -¡Es magico Jackie! ¡es magico! Entonces Lucinda habla ante el espejo y le pide: ¡quiero un abrigo bonito! El espejo vuelve a brillar con muchas luces brillantes y le da a Lucinda un abrigo elegante. Lucinda se lo pone y sale corriendo con la tarta junto con Jackie. Llega a su casa y se encuentra con su papa- ¡Papá adivina que encontré el castillo! - ¡No! ¿Queoe mija? - ¡Encontré un espejo mágico! Te cumple cualquier cosa que deseas. ¡Pues vamos! Su papá se pone el abrigo y se van hacia el castillo. Llegan y se meten de nuevo hasta llegar al corredor donde está el espejo. Llegan al cuarto en donde se halla el espejo. El papá se para frente al espejo y le pide un deseo - ¡Quiero que mi hija sea una chica grande! Entonces Lucinda empieza a cambiar de forma y se transforma en otra chica, una grande y bonita. Su papá agarra sus manos y le dice: Vas a tener mucha suerte. Entonces, su papá agarra el espejo y se lo lleva. 

El misterio de la chica de jade



En un día soleado y húmedo, un explorador llamado Robert, se encuentra llegando a una zona arqueológica, Yaxchilan. Los ayudantes de su barco, descargan los objetos de trabajo de su barca. Se internan en lo profundo de la selva y van buscando un nuevo templo recien descubierto. El explorador Robert  llega ante el y observa una escalera de piedra muy grande que llega a su cima. Sus ayudantes y el van subiendo y llegan a la cima en donde hay una entrada en donde hay un corredor grande. En el fondo del corredor grande, se encuentra una estela  misteriosa que no se logra ver a simple vista. El explorador prende una linterna y observa con atencion. En esa estela, se encuentra una imagen
de una chica con un vestido curioso como un tipo huipil blanco. La imagen de la chica contiene una pintura verde en su rostro. El explorador Robert se acerca con lentitud y va observando con atención los rasgos de la chica. Esa chica tiene una mirada curiosa y posee unos ojos rojos brillantes. En ese momento, Robert deja a un lado la linterna y se dispone a buscar una entrada. Tras observar bien, ve una abertura de piedra curiosa. En esa abertura, la abre y encuentra una escalera curiosa. Sus ayudantes y el van bajando moviendo su equipo lentamente. Llegan todos entonces a un gran cuarto de piedra. En el cuarto de piedra, observa un gran monolito. El explorador observa con atención el monolito y ve una inscripción curiosa. En el monolito, se halla un escrito curioso con unas letras tipo maya. Al leerlas, ve el explorador que dice lo siguiente: La princesa chica de jade puede aparecer ante ustedes. Los ayudantes y Robert se miran ante si y oyen un sonido de una voz femenina que sale del monolito. De repente, ante la mirada de ellos se destruye el monolito y aparece una chica como la que habían visto en la estela. La chica de jade, se baja del pedestal del monolito y se acerca lentamente ante ellos. Al darse cuenta de ello, los exploradores cierren hacia la escalera pero Robert se queda inmóvil ante la mirada de la chica. La chica entonces a través de su mirada lanza unas luces rojas que se meten en el cuerpo de Robert. Robert se contorsiona en el suelo y empieza a emitir una fosforescencia violeta.La chica de jade, sube corriendo lentamente la escalera, gritando en maya: iré por ustedes.Robert se queda quieto unos minutos con los ojos cerrados. Los abre y estos se ven rojos brillantes. La chica de jade, se encuentra con los ayudantes y estos se llevan las manos en la cara, presas de terror. De repente, la chica de jade lanza de sus manos un gas verde. Los ayudantes se desmayan y quedan en el suelo inmóviles. La chica de jade, camina entonces hacia la selva. En la selva, se encuentra con un jaguar. Se agacha y le dice: Dile a mi pueblo que tengo nuevos súbditos. En ese momento, el jaguar se interna de nuevo en la selva. La chica de jade, contenta regresa al templo y vuelve a bajar las escaleras en donde se encuentra al explorador Robert parado con los ojos encendidos. La chica de jade se acerca y le dice: serás mi súbdito por siempre y me ayudarás a calmar a mi pueblo. Robert asiente y lanza un fuego de su boca. La chica de jade sonríe y lanza una carcajada y se va con Robert de nuevo a la selva.